Corto Punzante

Con voz y guitarra, Manul desnuda la vulnerabilidad post quiebre amoroso en una entrega que se siente como un susurro a medianoche.

Después del viaje literario y emocional de «Piñata«, su primer disco y novela sonora, Manul vuelve a sumergirse en su propio universo creativo con “Marisol”, una canción que actúa como un lado B de ese proyecto.

Grabada en un formato minimalista, con solo voz y guitarra eléctrica, la pieza condensa la crudeza de una ruptura y el momento en que la tristeza se vuelve casi física.

“Grabé esta canción sin pensar en que iba a ser un lado B. Solo tenía la necesidad de grabarla porque me transmite mucha emoción”, explica la artista, quien encontró «Marisol» entre las maquetas del proceso de «Piñata«.

El tema forma parte de una serie de composiciones inéditas que Manul planea publicar para conmemorar el primer aniversario de su álbum debut.

Según cuenta, esas canciones “han moldeado la historia que sigue en constante progreso”, uniendo su doble identidad como música y escritora.

Con una estética indie pop íntima y confesional, “Marisol” se siente como un audio de WhatsApp enviado a las dos de la mañana: una carta que no se entrega, un intento por ordenar el desorden del corazón.

“La frase ‘y las ganas que tengo de hablarte me las voy a tragar’ resume ese momento en que emoción y contención se entrelazan”, dice Manul.

El videoclip, dirigido por Varinia Bastías, refuerza esa vulnerabilidad mostrando al personaje principal en un entorno doméstico caótico, una metáfora visual del derrumbe emocional tras una separación..