Una radiografía emocional que mezcla desamor, herencia familiar y salud mental en un LP donde lo ranchero y lo electrónico conviven sin pedir permiso.
nata! acaba de publicar «Lautaro«, su primer disco: once canciones que combinan pop alternativo, estética experimental y un pulso ranchero que huele a campo, celebración y herida abierta.
El álbum toma su nombre de la ciudad sureña que atraviesa la historia familiar de la artista, y funciona como un mapa afectivo donde conviven tradición y vanguardia, nostalgia y modernidad.
Aquí, sintetizadores, bajos y capas electrónicas se cruzan con guitarras y texturas de raíz, en una producción compartida entre Kuyen Galeas, Matías Cabello, Nicolás Quiroga, Carlos Reyes Calvert y Arturo Zegers.
nata! recoge los sonidos que escuchó desde niña (la música mexicana, los corridos, los boleros, la ranchera) y los funde con un pop que mira hacia adentro, hacia la memoria y hacia los dolores heredados.
«Lautaro» avanza como una crónica sentimental que habla sin rodeos de alcoholismo, silencio emocional, violencia afectiva y soledad en el Chile profundo.
Corto Punzante 
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