El músico y productor santiaguino radicado en Argentina vuelve a Chile para un reencuentro cargado de visceralidad y energía.
Después de agotar entradas en el Espacio del Ángel a fines de 2024, el artista regresa con un espectáculo que promete llevar su propuesta a un territorio más crudo y confrontacional.
Guitarras desafinadas, bajos distorsionados y una interpretación que empuja los límites formarán parte de esta nueva etapa, donde elmalamía dialoga con un alter ego que funciona como espejo y tensión en escena.
“Será un show continuo, con transiciones y medleys. Es mucho más rockero. Cada día me voy soltando más como performer. Hay momentos angelicales también, obvio. Pero los momentos más densos del show van a ser realmente densos. Está más oscuro. Hay más oscuridad. Todo es un poco más opaco”, adelanta el artista, dejando entrever que la presentación apostará por un viaje emocional sin atajos.
El concierto no solo marcará el desembarco oficial de “Pavlo”, sino también un repaso, como “lo que me queda” y “DRAMA”, reafirmando la continuidad afectiva que atraviesa toda su discografía.
Más que un retorno, la cita se plantea como una expansión de su identidad artística: una propuesta visual renovada, un enfoque performático más arriesgado y un relato que no busca alivio, sino verdad.
“Matucana 100 es un lugar mítico; realmente es un honor tocar ahí. Volver a Chile es un regalo, y hacerlo en ese teatro es algo que, en algún momento, anoté en mi lista de sueños. Va a estar precioso”, comenta elmalamía.
Con un show pensado como experiencia integral (donde el cuerpo, el ruido y la emoción funcionan como parte de un mismo pulso), elmalamía abre un nuevo capítulo antes de cerrar el año en su ciudad natal.
Corto Punzante 
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