La banda presenta su primer LP, una fusión visceral de post hardcore y post rock, que explora la introspección y la superación personal a través de letras emotivas.
Con una propuesta que transita entre el post hardcore, el rock alternativo y el post rock, la banda chilena Nunca Hubo Temporal presenta su primer álbum de estudio: un trabajo visceral y honesto, que combina riffs potentes, atmósferas densas y una búsqueda lírica ligada al autoconocimiento y la superación personal.
El debut homónimo del grupo marca el cierre de un proceso creativo iniciado en 2021. La producción fue realizada junto a Felipe Lara y Juan José Sánchez (Tenemos Explosivos) en Gitano Recs, con mezcla de Daniel Velázquez y Enzo Nitor, y masterización a cargo de Paolo Riffo en Estudio del Sur.
“Las letras nacen de un periodo de crisis y transformación. No son respuestas, sino un intento de avanzar, de encontrar voluntad para seguir”, comenta la banda sobre un disco que reflexiona sobre el dolor, la introspección y la aceptación desde una mirada directa y catártica.
El álbum propone un punto de encuentro entre la energía del post hardcore y las capas melódicas del post rock, con canciones que destacan por su fuerza interpretativa y su capacidad de canalizar emociones complejas.
Si bien el grupo evita definirse dentro de un género específico, reconocen haber abandonado la búsqueda técnica de proyectos anteriores, en favor de una sonoridad más cruda, emocional y potente.
“Queríamos hacer algo más directo, pero sin perder profundidad. Que sonara pesado, pero también emocional. El resultado es este disco que marca un antes y un después en nuestra historia como banda”, afirman.
Corto Punzante 
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